N.E.D.A.blog: Zodiaco, Romina Russell

martes, 1 de marzo de 2016

Zodiaco, Romina Russell

Sinopsis:

En el amanecer de los tiempos

Había 13 Casas en la Galaxia del Zodíaco.

Ahora solo quedan 12…

Rhoma Grace, una estudiante de 16 años proveniente de la Casa de Cáncer, tiene una forma inusual de leer las estrellas: indaga historias en el cielo en vez de seguir los pasos para realizar predicciones certeras. Y no puede resolver la incógnita ni para salvar su vida.

Cuando una violenta explosión desalinea la luna de Cáncer, matando a miles de ciudadanos, incluyendo a su amada Guardiana, Rho es la mayor sorprendida al ser nombrada como la nueva líder de su Casa. Pero, como una auténtica canceriana, ama su hogar con uñas y dientes y acepta proteger a su gente pase lo que pase.

Las catástrofes no se detienen en Cáncer. Cuando Casa tras Casa cae víctima de anormales accidentes meteorológicos, Rho empieza a sospechar que Ocus, el exiliado decimotercer Guardián de la leyenda, ha regresado para hacer cumplir su venganza a lo largo del Zodíaco. Ahora Rho ‒junto a Hysan Dax, un joven enviado de la Casa de Libra, y Mathias, un comandante de la guardia canceriana‒ deberá viajar a través de la galaxia para advertir al resto de los Guardianes.

¿Quién creerá lo que diga esta joven sin experiencia? ¿Y en quién podrá confiar Rho cuando el mundo se define por sus diferencias?

Yep, otra vez les vengo a hablar de un mundo bastante alejado del nuestro en el que una chica de 16 años (cómo no) que tiene que convertirse en adulta por una serie de sucesos inesperados. Creo que en esta ocasión la sinopsis explica más cosas de las que yo quisiera decir y es mejor no adentrarnos más en la trama para dejar algo a la imaginación. Y como bien dice el título, Zodiaco de Romina Rusell comprende un mundo que se rige por los signos del Zodiaco y la astrología. Al principio este tema me chocaba bastante porque nunca he sido creyente de estas cosas, me cuesta trabajo aceptar que solo existen 12 tipos de personalidades y que uno está irrevocablemente destinado, condenado, a vivir de esa manera. Pues bien, tuve que poner a un lado todas mis ideas previas respecto a esto para poder adentrarme en la historia.

Ahora bien, tenemos una chica con una gran sensibilidad para entender las estrellas por medio de la intuición más que la práctica mecánica y rígida. Alejada de las indicaciones, Rho ama escrutar el cielo, paseando la mirada de un lado a otro para entender la profundidad del Universo. Este aspecto si que me motivó en la lectura puesto que soy amante del espacio y todo lo que tenga que ver con la infinita nada. Pues bien, con Rho entendemos ese mundo de una forma más trascendente pues ella, una estudiante de Cáncer, no sólo estudia las estrellas, es parte del cosmos. Esta relación tan cercana con las constelaciones es un punto a favor de la novela.

La lectura de la novela exige mucha atención o conocimientos acerca de los temas astrológicos puesto que la narración se ve afectada por el uso de términos especiales. Sin embargo, no es imposible de leer, vamos que yo lo leí. Las primera páginas resultan un tanto pesadas porque se nos presenta un mundo muy diferente, lleno de reglas, tradiciones y estilos de vida inusuales. Para que me entiendan, en el mundo de Rho existen 12 constelaciones, una para cada signo zodiacal, y en esas constelaciones habitan mini universos muy diferentes. Estos universos cuentan con sus propias reglas, planetas, estrellas, luna... Así de compleja está la cosa. También los habitantes de cada signo tienen características particulares tanto en lo físico como en su manera de comportarse y todo responden a su ascendencia de acuerdo con el zodiaco.

La acción tiene lugar cuando Rho hace sus lecturas de estrellas y se da cuenta de que el signo 13 no es un mito que les contaban cuando niños sino que existe y está amenazando la existencia de toda la galaxia zodiacal (ese término me lo acabo de inventar). Y como ya vieron en la sinopsis, nuestra protagonista termina siendo guardiana de la casa de Cáncer y esto deja mucha responsabilidad sobre sus hombros porque no sólo debe cuidar su casa, ahora debe proteger a todas las demás. Los problemas no se le acaban porque aparece otra cosa terrible y malvada llamada amor y lo acompañan dos amiguitos que la harán distraerse de lo que verdaderamente es importarte: salvar el universo. Ustedes saben que yo nunca he sido fan de los temas amorosos y menos de los triángulos así que a pesar de tener dos jóvenes bastante interesantes, sigo siendo partidaria de asuntos trascendentes como saber que pasa con Rho y el 13.

Es un libro difícil de comenzar por las basta información que da desde un principio pero que si logras sortear esas páginas te recompensará con algunos giros inesperados. Al iniciar el libro no sabía si quería terminarlo o si me estaba gustando pero como creí que se debía a mi aversión al Zodiaco, decidí continuarlo. Aunque no soy fan del libro, reconozco que tiene aspectos muy buenos, como las construcción de estos universos y las personalidades de cada signo, que no sé si correspondan realmente al zodiaco pero había signos que si a todo. El punto es que no es una lectura para todo el mundo, por mi parte me animaré a leer Wandering Star, la segunda parte que ya se encuentra en en inglés y espero pronto traigan en español.